Quiero contar una anécdota que me sucedió hace poco en el trabajo y donde logré aplicar alguno de los consejos que el libro "Como hacer amigos e influir sobre las personas" nos da. La semana pasada tuve un encuentro un tanto negativo con mi jefa pues hice una cosa que no le pareció. El propósito de la junta era llamarme la atención y así fue. La noté bastante molesta y los argumentos que me presentó aunque eran válidos no eran del todo injustificables, claro que tenía con que debatirle a cada uno de ellos y defender mí punto pero me di cuenta que solamente haría más grande el problema.
En lugar de interrumpirla tratando de explicar mi versión o de discutirle, la dejé hablar, desahogarse y esperar a que terminara de decirme lo que me tenía que decir. La realidad es que me costó mucho trabajo pues no es fácil quedarse callado cuando te están diciendo cosas malas. Hubo algunas cosas que me molestaban pero traté de guardar la calma pues al final ella es la que manda, desgraciadamente nos guste o no los jefes tienen la razón pase lo que pase y siempre es mejor estar de su lado bueno. Cuando por fin terminó lo único que le contesté fue: "De inicio te pido una disculpa, sé que estuvo mal y tienes razón en estar así. Te garantizo que estoy trabajando en eso y no volverá a suceder". Puede leer en sus gestos que no era lo que esperaba oír, por lo que sólo me sonrió y me dijo "Wow, te agradezco que lo reconozcas y con esto me doy cuenta que esta conversación aquí debe de terminar". A partir de ahí salimos y seguimos siendo tan amigas como siempre, asunto olvidado.
Lo que les quiero decir con esto es que al final para la otra persona es muy importante desahogarse y permitir que diga todo lo que tiene que decir. Trae sentimientos que debe expresar y si interrumpimos no estamos ayudando a nuestra situación. Es importante escuchar para darle gusto a la otra persona, sobretodo si se trata de un superior. Al final, para poder terminar la conversación pronto es importante darle la razón, a lo mejor no al 100% si queremos mostrar nuestra postura pero siempre ayuda el empezar con "Sí, tienes razón, pero..." sé que no es fácil pero muchas veces es necesario.
Puede que esto no aplique siempre ni para todos los casos y situaciones pero les quería contar como me había resultado a mí por si se ven en una situación parecida donde esto los pueda ayudar y evitar hacer un drama de un pequeño problema.
Hola Daniela, que bueno que pudiste aplicar lo que aprendiste del libro. Me parece que realmente lograste el objetivo que plantea Dale Carnegie. Creo que todos debemos poner en práctica los consejos del libro para tener buenas relaciones en el trabajo y lograr lo que nos proponemos, o al menos no empeorar los problemas.
ResponderEliminarMuchas gracias por compartir tu experiencia.
SALUDOS